Acostumbrados desde que cruzábamos el Mississippi todas las noches al trapicheo de falacias entre, por entonces, marionetas de la farándula se produjo un colapso en los juzgados por "querellas" fundamentadas en hechos más normales de un patio de recreo que de actos susceptibles de llevar a trámite. Luego llegaron las sorpresas, cuando había que pagar costas y la ofensiva del denunciado o denunciada. Y ya todo quedó en palabras vacuas entre quienes tuvieron sus 15 minutos de gloria (Andy).
Cuando te llega el rumor de que tienen contra ti información, obviamente falsa, con la que te van a llevar a los juzgados debes, primero (y después de esbozar una sonrisa) poner en conocimiento de tu representante legal los hechos y luego esperar la notificación (como agua de mayo). A partir de ahí todo irá sobre ruedas porque es cuando saldrán a relucir las verdades, las cuales complicará y mucho a quien te ha imputado la comisión de un delito penal sabiendo que la denuncia falta a la verdad (en 2013 casi a mil personas les cayó la del pulpo por inventarse hechos ilícitos falsos)
Sólo puede denunciar quien puede, no quien quiere.