Y volviste

Cuántas horas ya en estos casi 30 años sentado en mi coche escuchando la radio, ahora toca Pepa Bueno pero han sido tantas voces, tantas noticias amargas que el mundo se me antoja ya ajeno. Hoy he tenido que poner el climatizador a 24 grados mientras, y tantas veces como noticias escuchadas, espero a que la riada de vehículos inicien la marcha. El sabor a café revolotea en mis pensamientos, Pepa habla de la última instantánea ganadora del World Press Photo que ningún periódico compró y sólo tuvo 29 "likes" en este medio universal y ya vi ayer: dos hombres pasan a un niño entre una valla que le puede desgarrar su alma desgarrada por el ser humano. Pienso en mi hijo y su "te quiero papi" de todas las mañanas mientras tras los cristales todo se distorsiona porque ha comenzado a llover, la misma lluvia que cae sobre los paraguas de quienes no quieren más inmigrantes, la misma lluvia que cae sobre quienes buscan no morir frente a una alambrada que me avergüenza y siento con pudor el agradable calor de este habitáculo que me lleva y me trae, sigiloso y respetuoso con el medio ambiente. Es el invierno que ha vuelto pintando la realidad a su antojo... y no lo hace mal.

Y aquí les dejo sus hermosos garabatos